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04 Nov 2015
Estrés - Google Images

¿Somos los españoles los más estresados de Europa?

Según diversos estudios e investigaciones, parece que los españoles somos la población más estresada de Europa. Intentamos conocer las causas de estos datos y los efectos que provocan en las personas y en la sociedad.

¿Cuándo aparecen estas investigaciones sobre el estrés?

Las investigaciones son relativamente recientes, en parte porque el estrés es una alteración bastante nueva y que corresponde mayoritariamente a los países desarrollados. Y dentro de esas sociedades desarrolladas parece que hay unas poblaciones más afectadas que otras.

Estrés - Google Images

La pasada crisis económica ha hecho mucha mella en estos estados emocionales que producen estrés y que pueden conducir, incluso, a la depresión.

¿Qué datos arrojan estas investigaciones?

A finales del 2014, un nuevo estudio de Zenpure para conocer el grado de estrés que padece la sociedad española revelaba que el 71% de la población (3 de cada 4 personas) afirmaba sufrir estrés.

¿Cuáles son las causas que nos provocan más estrés a los españoles?

En primer lugar ha estado la situación económica mundial que hemos vivido y que ha afectado tanto a Europa. La angustia ante las situaciones que hemos vivido, la incertidumbre en cuanto a un situación económica personal, real o supuesta, ha provocado que se eleven mucho los niveles de estrés en nuestro país. En el caso de España, existía, además, una intranquilidad mayor que en el resto de Europa. Todo apuntaba a que en nuestro país las cosas iban pero que en el resto y la crisis económica ha provocado que las empresas se hayan vuelto más exigentes y que la competencia se haya incrementado. Además, existía una opinión más generalizada que en otros países europeos de imposibilidad de cambiar de puesto de trabajo. Todos estos factores unidos, incrementan el nivel de estrés de las personas.

De hecho, según los resultados de una reciente encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE) el 59% de los trabajadores españoles sufre algún tipo de estrés en el trabajo. Mientras que un estudio de la Fundación Europea para la mejora de las Condiciones de Vida y Trabajo, tan sólo el 28% de los trabajadores europeos se ve envuelto en sitauciones de estrés. Una diferencia más que significativa…

Por tanto, la segunda causa mayor de estrés en nuestro país está relacionada con el trabajo. Concretamente los jefes son el principal motivo de estrés, seguido de los compañeros de trabajo. Y el entorno familiar también provoca estrés a la persona: madres, parejas e hijos, por este orden.

Por tanto, la economía (la intranquilidad de no poder hacer frente a pagos), el trabajo (el miedo a cambiar o a dejarlo) y la familia son los mayores causantes de estrés en la sociedad española.

¿Cómo lo combatimos?

Desde mi punto de vista, muy malamente. Y es que nos ‘empastillamos’ más de la cuenta.

Un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) presentado en el XI Congreso Internacional de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés, asegura que España ocupa el segundo lugar en consumo de tranquilizantes, solamente por detrás de Portugal.

Según Salvador Ros, presidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada, unos 6 millones de personas en nuestro país consumen tranquilizantes (que se utilizan normalmente para combatir la ansiedad y el insomnio). Este consumo viene aumentando entre un 4% y un 7% cada año desde 1990.

Y lo peor es que este tipo de fármacos sólo ayudan a aliviar los síntomas, pero no solucionan el problema de fondo, por lo que las personas se quedan enganchadas en un círculo vicioso.

¿Cómo podemos solucionar ese problema de fondo?

Aquí diferenciaría dos partes: aquello que tiene que ver con la infelicidad o el desequilibrio interior de la persona y aquello que tiene que ver con el entorno laboral.

El primero es más complejo de solucionar porque llama a la persona a reflexionar sobre su vida, su estado actual y su estado deseado. Y no todo el mundo quiere entrar en ese debate interno. Por tanto, practicar técnicas que relajen sus niveles de ansiedad, tales como la respiración, el deporte, el yoga, la meditación o el mindfulness, ayudarán a estas personas a encontrarse mejor y, quizá, desde ahí se atrevan a sumergirse en su interior y explorarlo de manera potenciadora. Todo esto sin prescindir de sus médicos, en caso de que estén tomando algún tipo de tratamiento.

En el caso de estrés laboral, este está normalmente relacionado con la organización del trabajo y las relaciones entre las personas de la organización. Algunas empresas están teniendo en cuenta esta realidad y están proponiendo actividades a sus trabajadores, tales como Mindfulness (técnica de meditación que promueve el bienestar en el trabajo y reduce el estrés) o la conciliación real entre la vida personal y la vida profesional.

En caso de que no se pueda sobrevivir en ese ambiente laboral, no porque sea malo, sino porque esté desalineado con los valores personales, no hay que tener miedo al cambio. De hecho, los españoles somos los que más miedo tenemos a cambiar, frente a otros países de la Unión Europea. Cambiar no significa que lo tiro todo por la borda y me despido… no. Significa que comenzaremos a reflexionar acerca de lo que más nos gustaría hacer y nos comenzaremos a preparar para un cambio. Quizá tengamos que aprender cosas nuevas… hagámoslo! Y comenzaremos a buscar en aquella dirección que nos haga sentir mejor. Nuestro cuerpo y nuestra mente nos lo agradecerán y probablemente también nuestro jefe si no estamos a gusto en donde estamos. Con calma y buscando aquello que nos haga sentir mejor en nuestro día a día.

Como conclusión diré que el presente es el resultado de tu pasado y lo que hagas hoy afectará a tu futuro.

admin

Mis valores son la flexibilidad, el respeto y la comunicación. Consultora, Formadora y Coach en coaching organizacional, desarrollo de habilidades de dirección y comunicación interpersonal y organizacional. Me entusiasma acompañar en las transformaciones de las personas y las organizaciones a través de la consultoría y la formación.

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