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14 Dic 2020
Ganar la lotería no te da la felicidad

¿Por qué ganar la lotería no te convierte en una persona más feliz?

‘El dinero no da la felicidad’, aunque pueda parecer que sí a priori… qué gran frase y qué cierta es.

 

¿Felicidad o satisfacción inmediata?

 

Ganar un premio te da una felicidad fugaz, lo que viene siendo una satisfacción inmediata. Si el premio es cuantioso, pudiera parecer que muchos de los problemas que tenemos desaparecen de repente. Y algunos lo harán… pero el dinero no pagará la solución de todos nuestros problemas.

Ya lo decía también un conocido anuncio publicitario… ‘Hay cosas que el dinero no puede comprar. Para todo lo demás…’.

Por tanto, ganar un premio es probable que no te convierta en una persona más feliz de lo que eres. Y resalto eso de ‘más feliz de lo que eres’… luego veremos por qué.

 

Lo que dura el premio…

 

De hecho, investigadores de las universidades de Estocolmo y Nueva York han realizado un estudio de investigación (con una muestra de más de 3.000 participantes premiados a lo largo de su vida) han determinado que sienten más satisfacción (incremento en la mejora de su calidad de vida), pero no en su felicidad (sentimientos cotidianos de los encuestados).

 

Muchas veces esa percepción de una mejora en la calidad de vida dura lo que dura el valor del premio.

 

Cuando el dinero obtenido con el premio se acaba, hay personas que se han visto en una situación, incluso, peor a su situación inicial. Por lo que un dispendio de ese premio hará que la sensación de satisfacción dure poco y un buen uso de ese premio provocará que la sensación de satisfacción se mantenga durante más tiempo.

Además, el hecho de ganar un premio te puede alejar de personas que estaban cerca de ti y sólo les interesaba algo de ti. O personas envidiosas a las que no les guste tu nueva situación. Lo que contribuiría a una percepción negativa del hecho de ganar un premio.

 

Cuando sí ayuda a incrementar la felicidad…

 

Ahora bien… para aquellas personas que ya transitan los caminos de la felicidad, un premio adicional puede servir para incrementarla aún más.

Investigaciones determinan que cuando el importe del premio es utilizado para la consecución de un objetivo personal, el incremento de felicidad en la persona se produce. Si uno ya tiene sus metas y objetivos y un premio le facilita la consecución de las mismas, se producirá, inevitablemente, un incremento de la felicidad de esa persona al ser poseedor de ese premio.

 

También incrementa los niveles de felicidad cuando se utiliza para ayudar o hacer felices a terceros.

 

Y es que el servicio a los demás, ayudar a los demás, hacer algo por los demás o regalar algo a otra persona nos convierte en personas más felices. Por tanto, un dinero invertido en hacer felices a otros, incrementa el propio nivel de felicidad.

Esto quiere decir que un premio sí puede incrementar los niveles de felicidad, siempre y cuando se conozca lo que a uno le hace feliz, lo que le hace sentir bien y lo que le aporta felicidad.

 

Caminar hacia la felicidad con o sin premio…

 

Una idea interesante es dirigirse hacia la felicidad independientemente de que nos toque o no un premio. Hay infinidad de cosas cotidianas que nos permiten estar felices y, por tanto, fomentar e incrementar nuestros niveles de felicidad. Ese es el camino a escoger y a transitar.

Porque si ya somos personas felices, un premio puede incrementar eso que ya tenemos. Es como la inspiración… si llega que te pille trabajando (que decía Picasso). Si un premio llega, que te pille trabajando por tu felicidad. 

Y si no llega, como estás en el camino, te estarás convirtiendo en una persona cada vez más feliz, con o sin premio.

admin

Mis valores son la flexibilidad, el respeto y la comunicación. Consultora, Formadora y Coach en coaching organizacional, desarrollo de habilidades de dirección y comunicación interpersonal y organizacional. Me entusiasma acompañar en las transformaciones de las personas y las organizaciones a través de la consultoría y la formación.

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