Habilidades más demandadas en los profesionales del futuro.

Ahora que llegan las épocas de selectividad y las finalizaciones de las titulaciones universitarias, es un excelente momento para hacer una reflexión acerca de cuáles son las habilidades más demandadas para los profesionales en estos momentos y de cara al futuro.

Parece que habilidades relacionadas con la tecnología y con la Inteligencia Emocional toman la delantera en el conjunto de habilidades demandadas por las empresas del presente y del futuro.

Los primeros datos los obtenemos del Informe Davos...

El Informe Davos es un documento realizado tras la reunión del Foro Económico Mundial, el grupo de líderes de todos los ámbitos que se reúnen anualmente para hablar de cosas que le preocupan a nuestro mundo. En ese informe se determinan, entre otras cosas, las habilidades empresariales más demandadas en los siguientes años.

En el año 2015 la Inteligencia Emocional no aparecía entre las 10 habilidades más demandadas. En el 2010 ocupa el sexto lugar. Objetivamente, ha irrumpido con fuerza.

La Inteligencia Emocional agrupa las habilidades psicológicas que permiten apreciar y expresar nuestras emociones, entender a los demás y utilizar esa información para guiar el pensamiento y el comportamiento.

Más allá, la Inteligencia Social es la habilidad que poseemos los seres humanos para vincularse e interactuar de forma efectiva con su entorno.  Se trata de otra competencia muy demandada en los profesionales del futuro. La Inteligencia Social desarrolla la sensibilidad al contexto, es decir, a tener empatía, no sólo con otras personas, sino en el contexto en el que están interactuando.

La Inteligencia Emocional pertenece a un grupo de habilidades denominadas como ‘habilidades blandas’ (soft skills), aquellas capacidades que las personas poseen para enfrentar las diferentes situaciones diarias de la vida profesional y personal.

Facilidad para relacionarse en entornos multiculturales…

Relacionarse con los demás de una manera efectiva, sobre todo en entornos con diferentes culturas y razas es otra de las habilidades blandas más demandadas en los profesionales del futuro, la competencia transcultural.

El trabajo en equipo y la globalización que obliga a interactuar con personas de todo el mundo convierte a la capacidad relacional en una habilidad imprescindible para el trabajo del presente y del futuro.

Desarrollar un pensamiento adaptativo consiste en actuar en circunstancias excepcionales o responder a situaciones inesperadas de manera efectiva.

Adaptarse a los cambios y ser una persona flexible son habilidades muy relacionadas con la capacidad relacional y la capacidad de trabajo en equipo.

La innovación y el intraemprendimiento, una tendencia cada vez más grande en las empresas…

Conectar puntos e interpretar señales para darles nuevos sentidos y desarrollar nuevas ideas nos lleva a desarrollar la creatividad en favor de la innovación.

En la actualidad ya se innova, no sólo en productos, sino también en procesos, en desarrollo del talento, en liderazgo, en, prácticamente, todas las áreas de las empresas. Y todas estas innovaciones conducen a una mejora de la productividad, una disminución en los gastos y un aumento de la motivación en las empresas.

En definitiva, una capacidad para generar nuevas realidades con lo que ya tenemos.

La tecnología está presente en nuestras vidas…

La irrupción de Internet en nuestras vidas ha provocado que cambien, no sólo los hábitos de las personas, sino también de las organizaciones.

La tecnología pasa a formar parte de nuestro día a día y se convierte en un conjunto de habilidades que se demandan en los profesionales del futuro.

El conocimiento de la tecnología y la capacidad para entenderla y usarla como herramienta para mejorar la eficacia de su trabajo es y será otra de las competencias más demandadas en los profesionales del futuro.

El pensamiento computacional se refiere a la implementación de conceptos y herramientas propias de la informática en la resolución de problemas.

Los analistas de Big Data serán profesionales con gran proyección profesional porque serán capaces de manipular y organizar grandes cantidades de información en formatos digitales.

Como conclusión…

El tipo de habilidades profesionales está cambiando en los últimos tiempos.

La formación y el aprendizaje continuo es otra habilidad fundamental para desarrollarse como un excelente profesional del futuro y para adaptar las habilidades actuales a las habilidades que se requerirán en un futuro que cada vez es más presente.